¿Por qué la gente escucha música?
El presente escrito no es para responder la interrogante, el verdadero propósito es reflexionar sobre la relevancia que tiene formular buenas preguntas relacionadas con nuestra actividad profesional.
Hace algunos años cuando me inicié en el ámbito de la investigación, mi directora de tesis me hizo comprender la importancia de identificar lo que realmente quería explicar o describir. Así como en la ciencia, la pregunta representa el eje principal que determina el éxito o fracaso del proyecto, de la misma manera en el ámbito personal y profesional, la calidad de nuestras preguntas determina la calidad de nuestra vida.
La mayoría de los músicos que hemos emprendido un proyecto hemos cometido el error de solo considerar los factores internos que nos motivan a realizar algo. “Quiero grabar un disco con mis canciones”, “Deseo abrir una academia”, “Voy a publicar mi método”, “Realizaré una temporada de conciertos”, etc. Sin embargo, dejamos en manos de la suerte o apostamos todo a la calidad de nuestro trabajo para alcanzar el éxito con nuestro proyecto. Sinceramente considero que ninguno de los dos son factores determinantes de que esto suceda, ¿Cuántos productos o servicios de primera calidad han desaparecido del mercado? ¿Cuántas personas con talento artístico impresionante viven en la pobreza o depresión?
Incorporar a los proyectos artísticos un plan estratégico y holístico nos permite medir nuestras aspiraciones, nuestra causa o nuestra propuesta. Pero no para tomar la decisión de hacerlo o no, porque cuando se emprende algo siempre se debe tener una postura por adelantado; ¡Nunca renunciaré!. Sino para conocer aspectos que nos ayuden a desarrollar nuestro propósito, y es ahí donde tienen obtienen gran relevancia nuestras preguntas primero hacia el interior y luego hacia los demás. ¿Realmente esto que quiero hacer esta en mi zona próspera o lo hago porque a otro le funcionó?, ¿Para quién es lo que hago y por qué lo adoptarán?.
La gente transforma sus vidas, los empresarios sus negocios y los artistas sus carreras con preguntas, porque a partir de ellas las personas se acercan a un estado fundamental que antecede a la evolución; la claridad, aquello que nos permite enfocarnos en el ángulo correcto, tal como la mira de un proyectil. En el ámbito empresarial, un plan de negocios se resume en preguntas y dos de las principales son ¿Qué venderé? y ¿A quién se lo venderé?.
En el plano artístico, hagas lo que hagas todos vendemos algo y tal vez nuestras preguntas principales podrían ser; ¿Qué vendo? y ¿Quién es mi público?, o quizá ¿Cuál es mi talento? y ¿Cómo puede influir positivamente en los demás?. Cuando tenemos claro nosotros mismos lo que hacemos y el por qué lo hacemos podremos ofrecerlo con toda precisión, de esa manera ya no tendremos el trabajo de tratar de convencer o persuadir al público, llámese cliente, prospecto o agencia para que adquieran lo que ofrecemos.
Se dice que el cliente o el público siempre tiene la razón porque sabe lo que necesita y lo que es correcto para si mismo, por lo tanto nuestro trabajo debe enfocarse en saber muy bien qué es lo que hacemos y para quien es. De esa manera podremos mostrarles con claridad y honestidad que nuestra propuesta de valor es aquello que realmente coincide con lo que desean y necesitan.
Valora la importancia de formular preguntas sobre tu vida.